Cada edificio es una huella, una marca del paso del tiempo o de algún momento que vivió nuestra localidad.

El patrimonio arquitectónico y urbano está conformado por todo lo que forma la ciudad, (Edificios, plazas, monumentos). Algunos bienes se los tratan de detectar, ya sea porque vivió algún personaje destacado, porque tienen una historia o porque son interesantes desde el punto de vista artístico.

En Bahía Blanca hay 200 bienes patrimoniales. A lo largo del tiempo ocurrieron pérdidas e intervenciones que afectaron a la ciudad.
Un claro ejemplo es el Club Argentino (rango de monumento nacional), construido en 1910. Cuenta una historia. Lo hicieron un grupo de vecinos de la ciudad, con plata propia, para tener un lugar donde reunirse, ya sea para  jugar a las cartas, para charlar, o concurrir a bailes y fiestas.
Hoy en día este edificio está teniendo muchos problemas, y lo que hoy están el club no reúnen fondos como para mejorarlo.

Otro ejemplo es el Banco Hipotecario (1926), es una Banco dedicado a préstamos para viviendas. Construye en Bahía Blanca la sucursal más importante del interior del país, como edificio. Cuando un banco hace una sucursal de este tipo, es porque detecta que esta ciudad tiene un potencial.

Con estos dos edificios podemos ver que Bahía Blanca a principios del siglo veinte, ya se consolidaba como una de las ciudades más importantes del interior.

Esto es el gran aporte que hacen los edificios, todo edificio está contando una historia, y atrás de ese edificio hay algo. Toda la arquitectura cuenta algo, refleja un momento.

Huaiquil Brenda, Rebuzzi Yesica